Razones para elegir el veganismo o vegetarianismo

Hablar de veganismo y vegetarianismo va más allá de simplemente decidir qué alimentos consumir; es una elección que abarca aspectos éticos, sociales y ambientales.

Esta transformación en nuestro estilo de vida, que comenzó como una transición hacia una dieta vegetariana durante la pandemia hace unos años y evolucionó hacia prácticamente vegana.

El cambio fue impulsado por una serie de razones personales y fundamentadas en diversas esferas, principalmente el encierro y la eco ansiedad que vivimos durante la pandemia fueron razones en esta transformación de vida.

Los motivos por los que las personas deciden llevar una alimentación vegana o vegetariana es variada. 

En primer lugar, el veganismo se presenta como una postura ética contra la explotación animal. Más que una simple elección alimentaria, es un compromiso integral que abarca aspectos como la vestimenta y objetos que evitan el uso de partes de animales.

Se trata de minimizar en la medida de lo posible la contribución a la explotación animal y promover un estilo de vida que respete los derechos de los seres vivos no humanos. Esta es la razón primordial del inicio de muchas personas.

Además, el veganismo se alinea con la preocupación por el medio ambiente. Las prácticas agrícolas para la producción de proteínas animales contribuyen a problemas ambientales significativos, como la deforestación, el consumo excesivo de agua y las emisiones de dióxido de carbono.

Optar por una dieta basada en plantas no solo es amigable con los animales, sino también con el medio ambiente, contribuyendo a la sustentibilidad y la reducción del impacto ambiental.

Reconocemos que no existe una forma perfecta de vivir que no afecte la vida y el medio ambiente, pero este estilo de vida busca reducir nuestro impacto en la medida de lo posible. 

Esta elección también tiene profundas implicaciones sociales no es solo una acción individual, sino que está ligada a nuestras interacciones sociales.

Aceptar la diversidad alimentaria en situaciones sociales, como compartir una comida en casa de amigos, refleja la comprensión de que nuestra elección alimentaria no debe ser impositiva ni generar divisiones.

Cuando nos reunimos en casa de amigos siempre aceptamos lo que nos ofrecen. Mi limite es el consumo de carnes, pero si estamos compartiendo una charla y momentos juntos con amigos y pidieron pizza, no tengo problema en consumirla.

De la misma manera en casa ofrezco únicamente opciones veganas y jamás ha generado controversia. Con esto me refiero a que la alimentación es una acción social, lo que comemos va ligado con quién, dónde y cuándo lo comemos.

La salud también es un factor determinante. Las investigaciones respaldan que una dieta rica en plantas puede ayudar a prevenir enfermedades como la obesidad, la hipertensión, la diabetes y el cáncer. Esta conexión entre la alimentación y la salud refuerza la idea de que el veganismo no solo es beneficioso para los animales y el medio ambiente, sino también para el bienestar personal.

Por último, el veganismo se presenta como un acto político. Va más allá de simplemente abstenerse de consumir alimentos de origen animal y se convierte en una declaración sobre la sostenibilidad, la ética y la responsabilidad individual en un mundo cada vez más consciente de la importancia de nuestras elecciones para el futuro del planeta.

En resumen, adoptar una dieta vegana implica considerar una variedad de factores éticos, sociales, ambientales y de salud. Más allá de ser una elección alimentaria, el veganismo se convierte en un estilo de vida fundamentado en la compasión hacia los animales, el respeto por el medio ambiente y la conciencia de las implicaciones sociales de nuestras elecciones alimentarias.

¿Llevás una dieta vegana/vegetariana? ¿Lo has considerado?