Ramen vegano rápido y fácil

Este plato es muy simple, nutritivo y reconfortante. Además, se pueden utilizar los ingredientes que tengamos en la heladera tanto para preparar el caldo como para añadir por encima.

El ramen es un plato tradicional japonés que ha evolucionado a lo largo del tiempo, pero siempre conserva su esencia: una combinación de fideos con caldo y acompañamientos. Se le puede añadir pasta de miso, salsa de soja, algas o cualquier tipo de verdura.

Al preparar ramen vegano, es importante considerar qué verduras deseas incorporar al caldo para obtener el sabor deseado. El caldo es la base fundamental del ramen y puede variar significativamente según los ingredientes utilizados.

Para un caldo vegano rico y sabroso, se pueden usar verduras como zanahorias, cebollas, apio, ajo y jengibre. También se pueden añadir hongos shiitake secos, que aportan un sabor umami profundo. Las algas son otro ingrediente clave que agrega un sabor marino sin necesidad de productos animales.

Además de las verduras, los fideos son otro componente crucial del ramen. Es importante cocinarlos adecuadamente para que tengan la textura adecuada: firmes pero tiernos.

El ramen vegano no solo es una opción deliciosa, sino también nutritiva y versátil. Además, como el Tofu Teriyaki, permite experimentar con diferentes sabores y texturas, adaptándose a los ingredientes que tengas a mano. Al entender y seleccionar los componentes adecuados, puedes crear un plato de ramen que sea tanto reconfortante como emocionante para el paladar.

Información General

• Tiempo de preparación: 15 min
• Tiempo de cocción: 30 minutos
• Dificultad: Fácil

Ingredientes

• 1 bloque de tofu extra firme
• 2 dientes de ajo
• 1 rodaja de 3 cm de jengibre
• 2 ramas de cebolla de verdeo
• 4 zanahorias
• 2 tazas de edamame
• ½ taza de tamari o salsa de soja
• 1 ½ litro de agua o caldo
• 200 gr Fideos ramen
• Sal y pimienta a gusto

Instrucciones

Paso 1: Picar en cubos pequeños los dientes de ajo y el jengibre, y reservar. Cortar las zanahorias en rodajas y la cebolla de verdeo.

Paso 2: Saltear con poco aceite en un wok u olla el ajo y el jengibre. Esta es mi parte favorita porque el aroma inunda la cocina y los niños suelen aparecer con el típico “tengo hambre.”

Paso 3: Agregar al wok la cebolla de verdeo, las zanahorias y la salsa de soja o tamari.

Paso 4: Añadir el agua y cocinar durante 20 minutos a fuego bajo.

Paso 5: Incorporar a la sopa los edamames y el tofu, y cocinar 10 minutos más.

Paso 6: Mientras se cocinan los últimos 10 minutos de la sopa, preparar los fideos según las indicaciones del paquete.

Paso 7: Finalmente, colar los fideos, incorporarlos al wok y condimentar con sal y pimienta. Cuidado con la sal: pruébalo antes de agregarla, ya que el tamari o la salsa de soja son salados. Yo suelo no agregar sal, solo pimienta.

Consejos

Consejo 1: Puedes presentar el plato con semillas de sésamo y cebolla de verdeo.

Consejo 2: Utiliza lo que haya en la heladera. La receta es simple pero tiene mucho potencial. Puedes agregar brócoli, espinaca, arvejas, hongos shiitake, champiñones, algas o miso (este último no lo he probado).

Consejo 3: En lugar de agua, puedes usar caldo de verduras. Por lo general, yo solo le agrego agua, ya que todo lo demás tiene muy buen sabor por sí solo.