Tesoros de cartón y dados: un viaje a través de los juegos de mesa. 

Desde que era niña, recuerdo pasar tiempo con mis hermanos jugando Monopoly, Pictionary, El juego de la vida y una variedad de juegos de cartas y dados que eran una parte esencial de nuestras vacaciones en el campo. Los días que más recuerdo con nostalgia son aquellos en los que pasábamos horas disfrutando de estos clásicos mientras afuera llovía. Recuerdo especialmente las divertidas peleas cuando hacíamos parejas para jugar al Pictionary, y siempre se prohibía que mi hermano Alexis y yo jugáramos juntos porque prácticamente necesitábamos dibujar un círculo para adivinar lo que el otro estaba intentando representar.

A medida que crecíamos, nuestros gustos también evolucionaban. En la adolescencia, nos aventuramos en el mundo de Calabozos y Dragones. Aunque no era precisamente mi juego favorito, estaba dispuesta a aceptarlo para compartir momentos con mis hermanos y sus amigos. ¡Y resultó ser una inversión a largo plazo, ya que terminé casándome con uno de esos amigos! Ahora, como familia, seguimos disfrutando de los juegos de mesa juntos, creando nuevos recuerdos que se suman a los de nuestra infancia.

Mientras los juegos clásicos de nuestra niñez siempre permanecerán en nuestro corazón, fuera de los clásicos existe una amplia variedad de juegos que despiertan interés al ofrecer nuevos desafíos y diversión. Entre ellos se encuentran juegos clásicos adaptados para niños, como el Monopoly, del cual existen innumerables versiones. Por ejemplo, uno basado en Mario Bros, con monedas de valores de 1 y 5, y con un tiempo de juego que no supera los 20 minutos, lo que lo hace ideal para empezar a jugar con niños pequeños.

Nuestra colección de juegos se expandió y descubrimos nuevas aventuras con juegos como Catán, Carcassonne y Ticket to Ride, que nos brindaron una experiencia de juego diferente pero igualmente gratificante. Estos juegos modernos no solo nos proporcionaron horas de diversión, sino que también nos desafiaron de maneras que nunca antes habíamos experimentado, ampliando nuestro repertorio a juegos más complejos.

Pero más allá del entretenimiento, los juegos de mesa también tienen un impacto significativo en el desarrollo social y académico de los niños. Ayudan a mejorar habilidades como la concentración, la memoria, la imaginación y la resiliencia. Los niños aprenden a colaborar, a tomar decisiones estratégicas y a resolver problemas de manera creativa mientras disfrutan del juego. Además, los juegos de mesa son una excelente manera de fomentar la comunicación y el trabajo en equipo, ya que los niños interactúan con otros jugadores para lograr un objetivo común.

Los juegos de azar, como el UNO, ofrecen la oportunidad de experimentar cambios no planeados. Una sola jugada puede cambiar por completo tu suerte. Jugar de esta manera ayuda a los niños a aprender a recuperarse de una decepción y a seguir avanzando hacia una meta final. Sin embargo, es importante comprender que, como adultos, este juego pondrá a prueba nuestra paciencia, ya que la frustración puede ser difícil de procesar, especialmente para los niños.

Jugar a juegos de mesa también enseña a los niños lecciones importantes sobre la vida. Aprenden a perder con gracia, a celebrar las victorias de los demás y a trabajar en equipo hacia un objetivo compartido. La paciencia, la tolerancia y el respeto por las reglas son habilidades que se desarrollan naturalmente durante una partida de mesa y que son fundamentales para la vida cotidiana.

Además, los juegos de mesa ofrecen una valiosa oportunidad educativa. Desde habilidades numéricas tempranas hasta conceptos más avanzados como la planificación estratégica y la gestión de recursos, los niños pueden aprender y practicar una variedad de habilidades mientras se divierten jugando. Los juegos de mesa también fomentan la alfabetización y el pensamiento crítico, ya que los niños leen las reglas del juego y toman decisiones basadas en la información disponible.

En resumen, los juegos de mesa no solo son una fuente de entretenimiento, sino también una herramienta poderosa para el crecimiento y el desarrollo personal para toda la familia. Son una forma de conectar con los seres queridos, aprender nuevas habilidades y crear recuerdos que perdurarán toda la vida.

¿Cuál es tu juego de mesa favorito y cuál es la historia más divertida que has vivido mientras lo jugabas?

Written By